sábado, 26 de mayo de 2012

CFK IMPONE MORDAZA AL ABORTO LEGAL

http://po.org.ar/po1223/2012/05/24/cfk-impone-mordaza-al-aborto-legal/


   La Presidenta convocó a un equipo de juristas para reformar el Código Penal, que incluye a las representaciones parlamentarias. La agenda tiene un solo tema vedado: la cuestión del aborto. CFK impuso ese criterio cuando reunió, a principios de año, a los juristas que abordarán el tema. El conjunto del arco político acompaña el criterio presidencial.
   Para CFK, el aborto debería incluirse en el marco de una ‘ley especial’. Sin embargo, en diciembre, cuando el tema estaba en tratamiento en una reunión de comisión conjunta, los K se negaron a dar dictamen. En lo que va del año tampoco ha tenido tratamiento. La Presidenta ha bloqueado desde 2007 todas las instancias legislativas sobre el derecho al aborto.
   La Comisión de Reforma del Código Penal ha reafirmado el gran acuerdo nacional con el clericalismo sobre la cuestión.
   El 28 de mayo, en el Día Internacional de la Salud de las Mujeres, nos movilizaremos al Congreso para reclamar el tratamiento del aborto legal, la aprobación del tratamiento de fertilización asistida para todas las mujeres de forma gratuita y sin impedimentos burocráticos en todo los hospitales públicos del país, para denunciar la injerencia de los sectores clericales en la salud, la política y la Justicia, y el silencio del gobierno nacional ante el fallo de la Corte Suprema sobre la cuestión de los abortos para mujeres violadas.
Vanina Biasi

POR LA APARICIÓN DE YAMILA CUELLO


http://po.org.ar/po1222/2012/05/17/por-la-aparicion-de-yamila-cuello/

REDES DE TRATA

Gran marcha en Córdoba

   El pasado jueves 10 de mayo, en el marco de la campaña por la inmediata aparición de Yamila Elizabeth Cuello, resuelta e impulsada por el Plenario de Trabajadoras, se realizó una marcha, que contó con la presencia de familias de desaparecidas, numerosas organizaciones y la adhesión de muchísima gente durante todo su recorrido.
   Yamila Elizabeth Cuello tenía 19 años al momento de ser secuestrada en su barrio Coronel Olmedo, por las redes de trata.
   La familia, desde el primer momento, puso el caso en manos de la Justicia cordobesa, sin encontrar respuestas, sólo el arbitrario allanamiento de su domicilio particular. Después de dos años y medio, la familia ha tomado la firme decisión de actuar por sí misma, por un lado, tomando participación como querellante y ganando las calles.

   En la movilización estuvo presente también la familia de Jimena Natalí Arias, de 21 años de edad, y madre de tres niños, desaparecida el 5 de marzo, en barrio Ciudad Evita.

La lucha por la aparición de todas las compañeras desaparecidas, para avanzar en el desmantelamiento de las redes de tratas, y en el juicio y castigo a todos los responsables políticos, judiciales y policiales implicados en ellas, es inseparable de la lucha política de las trabajadoras por la organización independiente de los diferentes gobiernos de turno.

María Celeste
Plenario de Trabajadoras Córdoba

EL FEMICIDIO Y LA REALIDAD

http://po.org.ar/po1220/2012/05/03/el-femicidio-y-la-realidad/

   El artículo 80 del Código Penal enumera las causas que reciben, en casos de homicidio, la pena de reclusión perpetua. La Cámara de Diputados acaba de dar media sanción a una modificación que amplía las causales establecidas en el inciso 1, referida a “la pena de reclusión perpetua o prisión perpetua al que matare a su ascendientes, descendiente o cónyuge”, para incluir al “ex cónyuge, o a la persona con quien mantiene o ha mantenido una relación de pareja, mediare o no convivencia”. En el caso del inciso 4, amplia a los casos de “género o a la orientación sexual, identidad de género o su expresión”, el homicidio “Por placer, codicia, odio racial o religioso”. En algunos casos, las modificaciones ya se encontraban incorporadas en la jurisprudencia.La modificación incorpora al artículo dos incisos: la perpetua cuando el asesinato de una mujer “sea perpetrado por un hombre y mediare violencia de género” (algo que deberá evaluar el juez) o se ejecute “con el propósito de causar sufrimiento a una persona con la que se mantiene una relación en los términos del inciso 1″.
   Por último, la modificación del el artículo 80 in fine, descarta los atenuantes en los casos en los que “anteriormente hubiera realizado actos de violencia contra la mujer víctima”.

   Estos cambios en el ámbito penal constituyen una confesión de fracaso en el ámbito político y social: el delito de género se extiende como mancha de aceite a pesar de todas las reformas ‘progres’ en materia civil. Este agravamiento pone al descubierto que ese delito está alojado en la estructura de clase de la sociedad, que rechaza la socialización de la unidad familiar, la igualdad efectiva de la mujer y el desarrollo social de la niñez. Las reformas al Código acentúan la capacidad punitiva del Estado, bajo cuyo dominio se ejerce, en forma cada vez más agravada, la violencia de género. A los legisladores ni se les pasó por la cabeza la contradicción flagrante de su posición. Llevada a un extremo, la protección civil que procura esta legislación llevaría a un régimen cada vez más gobernado por el Código Penal. Lo mismo hace el estado actual con las guerras; como no las puede prevenir y por el contrario las fomenta, ha establecido una Corte Penal internacional para castigar a los criminales de guerra, a los que en general solamente encuentra en el campo de los vencidos.

   Las representantes de todos los bloques políticos han festejado la media sanción, lo que demuestra que el género no facilita la comprensión de las cosas. Está comprobado internacionalmente que el incremento del castigo no desalienta en lo más mínimo el delito. El crecimiento exponencial de la prostitución, en un marco de crisis mundial y de implacable ‘ajuste’ contra las clases populares, deja en claro cuál es la salida que el capitalismo deja abierta a la mujer que se encuentra en una impasse social, en especial a las jóvenes y a las jefas de familia. Es mentira que el uso del Código Penal dé ‘señales’ a la sociedad, que actuarían de contención del delito. Que esta misma gente se niegue a votar el derecho al aborto gratuito y público, muestra lo lejos que están de apoyar la conciencia de género de la mujer. La emancipación de la mujer de la violencia social de género, incluida la prostitución y la trata, está vinculada al desarrollo de la capacidad de lucha de la mujer, que sólo puede darse en el ámbito colectivo de la lucha de clases de los trabajadores. La organización independiente de la mujer es el arma de defensa contra la violencia de género; no lo va a lograr el agravamiento de las penas del Código Penal.

   Las diputadas festejantes no repararon en que se les quedó en la cartera una modificación del Código que no apunte a agravar sino a atenuar penas: para las mujeres que cometen un delito como consecuencia, no solamente directa sino indirecta, de la violencia física y psicológica, o como resultado de ella, no solamente en el ámbito hogareño sino también el laboral. Los atenuantes que contempla la legislación actual son desconsiderados en sede judicial, como lo muestra el número de mujeres detenidas en esas circunstancias. Es necesaria una legislación que asegure la capacidad de independencia de la mujer, en primer lugar el derecho al trabajo por un salario nunca inferior al costo de la canasta familiar. Los partidos que votaron los cambios al Código son, sin embargo, los campeones del desempleo, la flexibilidad laboral y el asistencialismo parasitario y clientelar.

   Código Penal u organización independiente de la mujer y revolución social: “ésa es la cuestión”.

Vanina Biasi